Nuestros dientes y encías también sufren y se desgastan con el paso del tiempo y reflejan nuestros hábitos de vida y, en una sociedad muy preocupada por el aspecto físico y la imagen que proyectamos hacia los demás, cada vez surgen más técnicas y tratamientos para conseguir la sonrisa perfecta, ya sea mediante ortodoncia para corregir la alineación de los dientes, como realizando un blanqueamiento dental para conseguir una sonrisa más reluciente.
Sin embargo, junto a los métodos profesionales, también aparecen un sinfín de remedios caseros, algunos de los cuales pueden conllevar más desventajas que beneficios. Es posible que hayas escuchado alguna vez que lavarte los dientes con agua oxigenada te ayuda a blanquearlos, pero su uso continuado puede tener importantes consecuencias para nuestra salud oral. Te contamos todo a continuación.
¿Qué es exactamente el agua oxigenada?
El agua oxigenada también se conoce como peróxido de hidrógeno, peróxido de dihidrógeno, dioxogen o dioxidano, y es un compuesto químico que a temperatura ambiente se encuentra en estado líquido. Es incoloro, pero tiene un fuerte olor desagradable y, aunque no es inflamable, es un potente oxidante cuando entra en contacto con materia orgánica o algunos metales, pudiendo causar combustión espontánea.
Podemos encontrar peróxido de hidrógeno en bajas concentraciones en productos cotidianos con fines medicinales y también como blanqueador de ropa y cabello. En la industria se utiliza en altas concentraciones para blanquear telas y para preparar el combustible de los cohetes y otras sustancias químicas.
Debido a sus propiedades oxidantes, el agua oxigenada es un antiséptico general que se ha venido utilizando en hospitales, centros médicos y clínicas, pero su uso está descendiendo, ya que se está sustituyendo por otros productos.
¿Es seguro lavarse los dientes con agua oxigenada?
Las recomendaciones populares acerca del uso del agua oxigenada en los dientes hablan de empapar un algodón o bastoncillo y presionar sobre los dientes o poner unas gotas en el cepillo de dientes y frotar, e incluso realizar enjuagues periódicos. Sin embargo, resulta ineficaz a la hora de blanquear los dientes y tiene múltiples consecuencias negativas para nuestra salud bucodental.
El agua oxigenada es bastante agresiva con nuestro esmalte dental, lo que va a provocar una alta sensibilidad y el desgaste progresivo de los dientes, haciéndolos más vulnerables a caries, fracturas y otros problemas. Además, es dañina para nuestras encías, mucosas, labios y mejillas por su efecto abrasivo, generando incluso quemaduras e irritaciones si se hace un uso continuado.
Si tenemos algún implante dental, empaste o corona, el agua oxigenada también puede dañarlos. Dado su efecto abrasivo e irritante, puede causar retracción gingival, una patología muy grave, ya que expone la raíz del diente. Teniendo en cuenta todas estas posibles consecuencias, lo más sensato es no hacer caso de los remedios caseros que invitan a utilizar de manera habitual agua oxigenada.
Lavar el cepillo de dientes con peróxido de hidrógeno
Se puede lavar el cepillo de dientes con agua oxigenada siempre y cuando se haga muy de vez en cuando, en una solución muy diluida y siendo conscientes de las potenciales consecuencias negativas que puede tener en nuestra boca. Aun así, lo más recomendable es colocar los cepillos en vertical, sin tapa y alejado de otros cepillos para que se seque al aire y también, cambiarlo con cierta regularidad, para impedir la proliferación de bacterias.
Si lo que buscas es una limpieza más profunda del cepillo de dientes hasta que llegue el momento de tirarlo, puedes utilizar desinfectantes o enjuagues antibacterianos recomendados por tu dentista.
¿Por qué es mejor recurrir a un blanqueamiento profesional?
Es posible que el mito de que el peróxido de hidrógeno te ayuda a blanquear los dientes en casa haya surgido porque en el ámbito profesional se utiliza este químico como principal agente blanqueante, pero con ciertas diferencias. En el dentista se preocuparán de proteger previamente tus encías para que, de esta forma, el blanqueante, aplicado en formato gel, actúe solo sobre los dientes. Además, se tienen en cuenta las proporciones y los tiempos de exposición.
En la farmacia y por internet se pueden encontrar kits blanqueadores caseros, pero, para que sean seguros, la concentración del agente blanqueante es tan baja que no notarás efectos ni notorios ni duraderos en el color de tu dentadura. Si quieres lograr una sonrisa radiante de manera segura y duradera, lo mejor es que acudas a un profesional de la estética dental.
Di «no» a los remedios caseros. Recurre a un buen dentista.
Que en el dentista se utilicen productos cuyo elemento principal es el peróxido de hidrógeno, no es equivalente a bajar a la farmacia o al supermercado, comprar agua oxigenada y hacerse enjuagues. Si utilizamos bajas concentraciones de peróxido de hidrógeno y, además, lo diluimos para tratar de evitar sus consecuencias abrasivas e irritantes, su posible poder blanqueador se pierde, por lo que resulta del todo ineficaz y contraproducente.
Si estás buscando mejorar tu sonrisa consiguiendo unos dientes más blancos, no dudes en llamarnos al 925 820 328 o visítanos en nuestras clínicas de Talavera de la Reina o en Lagartera. Nuestros profesionales estudiarán tu caso y te recomendarán el blanqueamiento que mejor se ajusta a tus necesidades y objetivos.